sábado, 22 de junio de 2013
De nuevo por aquí
Vuelvo a retomar el blog, he estado muy ocupado pero llega el verano y apetece retomar aficiones como esta, espero poder ayudaros.
lunes, 12 de noviembre de 2012
Perca Sol o Lepomis gibbosus
Hábitat: Se puede encontrar en pequeños lagos, charcas o zonas bajas de grandes lagos y ríos de corriente lenta, en general prefiere zonas claras y de abundante vegetación.
Distribución: Es originario de América del Norte, pero se puede encontrar en la península Ibérica, se introdujo por primera vez en el lago Bañolas. En España es considerado una especie problemática debido a su potenciar colonizador.
Alimentación: En cuanto a esta es carnívoro, se alimenta de pequeños moluscos, alevines o peces mas pequeños que él.
Respecto a su carácter es gregario, en época de celo muy territorial.
Características morfológicas: Cuerpo alto y comprimido lateralmente. Aleta dorsal única, con radios espinosos en la parte anterior y blandos ramificados en la posterior. Color llamativo con dibujos sinuosos verde azulados y naranjas, vientre también anaranjado y una mancha negra rodeada de rojo por detrás en los opérculos. Puede alcanzar hasta unos 30 cms. de longitud total, aunque en nuestras aguas es raro que llegue a los 20 cms.
Reproducción: Acontece de mayo a julio. El macho realiza una depresión en el sustrato, donde cuida la puesta de varias hembras, con las que ha desovado previa u sucesivamente. Cada hembra puede poner en una temporada un número muy variable de huevos (de medio millar a unos 40.000).
Diferencias sexuales: Los machos son de colores más vistosos que las hembras y tienen el extremo del opérculo más marcado, con una mancha de color rojo en los machos y naranja en las hembras.
Condiciones: Resisten una amplia gama de características del agua, son muy adaptables, la temperatura puede ir desde 4º a 22º subiendolo un poco para la reproducción.
miércoles, 18 de enero de 2012
Peces que cuentan hasta cuatro
Christian
Agrillo y su equipo investigaron la conducta del pez mosquito,
también llamado pez gambusino o gambusia ('Gambusia affinis'). Esta
especie, cuyos ejemplares miden entre cuatro y siete centímetros, de
agua dulce es originaria de Norteamérica (en concreto, del Golfo de
México) pero fue introducida en Europa hace casi un siglo.
Su
habilidad numérica se encuentra a la par de la de los monos, los
delfines y los niños de entre seis y doce meses.
"Hemos
aportado la primera prueba de que los
peces exhiben habilidades matemáticas rudimentarias",
ha señalado el psicólogo experimental Christian Agrillo, de la
Universidad de de Padua (Italia).
"Para protegerse de los predadores, estos peces tienden a formar grupos numerosos. A través de los experimentos de laboratorio hemos observado que colocando un pez frente a dos grupos de número diverso, el pez solitario reconoce el mayor y tiende a agregarse a ese", ha declarado Agrillo.
La decisión se produce siempre que el pez solitario debe escoger entre grupos de dos o tres miembros y de tres o cuatro. Sin embargo, cuando tiene que elegir entre grupos de cinco o seis, el pez solitario no llega a ser capaz de distinguir cuál de los dos es mayor.
No obstante, si la diferencia entre ambos grupos es muy grande, como cuando tiene que decidir entre grupos de ocho y dieciséis, el pez solitario es capaz de agregarse al más numeroso.
Los científicos han deducido a partir de estas observaciones que el Gambusia holbrooki sabe contar hasta cuatro y piensan que otras especies de peces también podrían hacer las mismas cuentas.
"Nuestra investigación nos ha llevado a establecer que los peces usan una especie de acumulador interno para distinguir el grupo más numeroso, o bien son capaces de estimar la cantidad de espacio que el grupo ocupa", ha explicado Agrillo.
Un experimento
realizado por Agrillo fue el relacionado con el acoso que sufrian las
hembras ye este fue el resultado:
Para
determinar si los peces tenían cabeza para los números, el equipo
hizo uso del hecho de que las hembras que estaban siendo acosadas por
un macho huían
hasta el mayor banco de peces cercano para refugiarse.
En
su experimento, la hembra de pez examinada se encontraba en un tanque
de agua central, separado de dos tanques adyacentes que contenían
bancos de peces de distintos tamaños y que ella podía ver. Cuando
era acosada, se dirigía al más grande,
incluso cuando no podía unirse a los peces que lo componían.
Los
investigadores mostraron que el pez podría distinguir entre bancos
que contenían uno o dos peces, dos o tres peces y tres o cuatro
peces. Pero no podían diferenciar entre bancos de cuatro o cinco.
A
mayores magnitudes,la
diferencia entre los bancos ha de ser también mayor para
que la hembra de pez tome una decisión coherente.
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